Vitivinícolas chilenas planean invertir más US$ 100 millones en tierras peruanas

Las empresas Concha y Toro, Grupo San Pedro y Santa Rita estarían mirando con gran interés arribar a Perú a través de compras directas o joint venture con socios locales.

(USI)

Por: Redacción Gestion.pe

Rocío Barja Marquina
rocio.barja@diariogestion.com.pe

Una tierra virgen para producir vino, una mano de obra económica, así como un bajo coste de energía son los factores que estarían atrayendo fuertemente a las más importantes vitivinícolas chilenas a invertir en el Perú.

De acuerdo con fuentes del sector en el país del sur, a las que accedió en exclusiva Gestión, las empresas Concha y Toro, Grupo San Pedro y Grupo Santa Rita (que concentran el 82% del mercado chileno en la producción de vino), así como algunas medianas y pequeñas bodegas, tendrían gran interés por ingresar al mercado local a través de la compra directa de terrenos o a través de joint venture con propietarios peruanos.

“Están buscando oportunidades a un bajo perfil. Entre los principales motivos que las estarían empujando a mirar nuevos horizontes se encuentran la alta tecnificación y el ingreso de maquinaria en todos los campos por la dificultad del costo de la mano de obra, así como el factor productivo para sacar en tiempo adecuado la producción”, anotaron.

En ese sentido, afirmaron que estas inversiones podrían estar concretándose en el Perú en un plazo máximo de cinco años. “Creemos que lo que está trabando en este momento las inversiones en Perú y en Colombia (que son mercados atractivos para Chile en este sector) son las pocas garantías que existen para la inversión extranjera”, dijeron.

Inversiones
De acuerdo con las fuentes del sector vitivinícola mapocho, la inversión mínima para levantar una bodega asciende a US$ 40 millones. En ese sentido, las empresas en mención podrían estar arribando a Perú con más de US$ 100 millones en una etapa inicial.

“Este dinero solo sería para la compra de hectáreas y la construcción de bodegas, porque las maquinarias se mueven de país a país”, puntualizaron.

Comentaron que lo que se estaría buscando son campos productivos de más o menos 400 hectáreas inicialmente, ya que luego la idea es ir complementando espacios de acuerdo a cómo se va incrementando la demanda de los vinos que se produzcan en estas tierras.