El nacimiento del iPhone, narrado por uno de sus ingenieros

Apple, la empresa fundada por Steve Jobs, revela en la antesala de un nuevo juicio contra Samsung por violación de patentes, los detalles de cómo fue desarrollado el más popular de sus dispositivos.

(Foto: 9to5mac.com)
(Foto: 9to5mac.com)

Por: Redacción Gestion.pe

El punto de partida de la historia del iPhone tuvo lugar en el 2004. Hace diez años, Apple puso bajo la conducción del ingeniero de software sénior Greg Christie un proyecto secreto titulado “Purple” (morado), con el propósito de diseñar el primer teléfono con una pantalla táctil y con un reproductor de música integrado.

Christie nunca había hablado en público sobre los primeros días del desarrollo del iPhone, pero Apple permitió que lo hiciera en la antesala de un nuevo juicio sobre violación de patentes contra Samsung Electronics Co. para subrayar un elemento clave de su defensa judicial: qué tan innovador era el iPhone en el 2007, el año de su debut.

Según el reportaje de Daisuke Wakabayashi en The Wall Street Journal Americas, durante varios meses, el ingeniero presentó a Steve Jobs, fundador de Apple y por entonces presidente ejecutivo de la empresa, los avances del proyecto “en una sala de reuniones sin ventanas en el segundo piso de la sede de Apple en Cupertino, California”, a “un puñado de empleados tenía acceso”, y a la que “el personal de limpieza tenía prohibida su entrada”.

No obstante, un año después de iniciados los trabajos, Jobs lanzó un ultimátum: El equipo, que era muy pequeño, tenía dos semanas para presentar el aparato o asignaría el proyecto a otro grupo. “Steve básicamente había perdido la paciencia”, recuerda Christie, quien sigue al frente del equipo de interfaz de usuario de Apple. “Quería ideas más grandes y conceptos más grandes”.

Desde entonces, se abocaron a los detalles, como lograr la velocidad perfecta para deslizar listas en el teléfono. Cuenta Christie, según el relato de Wakabayashi, que su equipo “se golpeaba la cabeza contra la pared” sobre cómo cambiar los mensajes de texto de una lista cronológica de mensajes individuales a una serie de conversaciones separadas similar a los chats en una computadora.

Pero luego de “un maratón de dos años”, según lo dicho por Chritie, lograron el aparato que ansiaba Jobs. A fines del 2006, unos meses antes de la presentación del iPhone (junio del 2007), el presidente ejecutivo pidió que elimine la vista de pantalla dividida para el correo electrónico, con información del remitente en un lado y el mensaje en el otro. “A Steve le parecía que era tonto partir la pantalla en una pantalla tan pequeña”, recuerda Christie.

Casi siete años después, Christie dice que un momento sobresale en su memoria. Unos días antes de la presentación de Jobs, Christie entró al auditorio donde se llevaría a cabo el evento por una puerta lateral utilizando dos identificaciones de seguridad, luego abrió una cortina gruesa. Lo que vio fue una imagen gigante de la pantalla de inicio del iPhone proyectada en la pantalla en un cuarto oscuro. En ese momento, señala, se dio cuenta de lo importante que sería el teléfono.

“Estaba brillando en este enorme espacio”, recuerda Christie. “Se me paró el corazón y pensé: ‘Esto está sucediendo realmente”.

Juicio
Desde el 2007, Apple ha vendido más de 470 millones de iPhones, pero el teléfono se encuentra en el centro de disputas sobre patentes en varios países entre Apple y Samsung, los dos fabricantes de smartphones más grandes y rentables. El gigante de Silicon Valley asegura que Samsung copió sus diseños y características de software, mientras que el fabricante surcoreano argumenta que muchas de las innovaciones del iPhone y el iPad no son exclusivas de Apple.

En otro juicio de patentes, una corte en California falló a favor de Apple y ordenó a Samsung que le pague US$930 millones. Samsung está apelando la decisión.

La próxima ronda empieza el 31 de marzo en Estados Unidos. Apple afirma que Samsung infringió cinco patentes más, incluida la función de “deslizar para desbloquear”, cuya invención atribuye a Christie. Por su parte, Samsung la acusa de violar dos de sus patentes. La indemnización podría ser mayor que la adjudicada en el juicio anterior, porque este caso cubre funciones en modelos de teléfonos más recientes que se vendieron en mayor volumen.