Acreedores exigen ley especial para reactivar complejo de La Oroya
Discrepancias entre el MEM y Minam por norma ambiental son el punto de conflicto por paralización de refinería. Existe posibilidad de que mina Cobriza sea vendida por separado.
Por: Wilfredo Huanachín Osorio
Para este viernes 14 de agosto se tiene previsto una nueva reunión de la acreedores por los activos de Doe Run Peru (DRP), en la búsqueda de una solución para volver a operar el complejo metalúrgico de La Oroya (Junín).
Fuentes del sector vinculada a los acreedores mineros dijeron a Gestión que la única medida que puede facilitarla puesta en marcha es que se bajen los estándares ambientales exigidos para la refinería.
Sin embargo, se comentó de fuertes divergencias entre el Ministerio de Energía y Minas y el Ministerio del Ambiente para resolver este impase, sobre todo después de que se aprobó el Instrumento de Gestión Ambiental Correctivo (IGAC), y ante la negativa de los postores en participar de la subasta internacional. Ante ello, los acreedores mineros exigen que el Ministerio del Ambiente emita una ley con régimen especial que sirva como marco normativo para el desarrollo de la refinería.
En la actualidad la exigencia ambiental de aire en La Oroya debe ser de 80 microgramos de dióxido de azufre por metro cúbico (80 ug SO2/m3), mientras que en Canadá el estándar es de 250 ug SO2/m3, y en Chile está entre 350-250 ug SO2/m3.
“Lo más importante no es cobrar las acreencias, sino reactivar el complejo. A La Oroya no lo compra nadie si esto no se corrige”, comentó la fuente.
Ventas por separado
Después del 27 de agosto, existe la posibilidad de que la mina Cobriza (Huancavelica) pueda venderse por separado, ya que así lo permite la ley concursal.
No obstante, se dijo que los acreedores mineros unas ocho empresas entre las que están Volcan, Glencore, Cormin, El Brocal, Buenaventura y Pan American Silver reclaman que se reactive el complejo de La Oroya ya que es uno de las pocas refinerías en el mundo que puede procesar concentrados polimetálicos en simultáneo (plata, plomo, zinc). También se calculó que anualmente el complejo metalúrgico de La Oroya está perdiendo hasta US$ 600 millones en ingresos por su inoperatividad.
Por otro lado, se reclamó que Sunat y Aduanas no hayan considerado la clasificación arancelaria de una serie de pilas de ferritas acumuladas en La Oroya por un valor de US$ 45 millones, y lo clasifique como residuos de baja ley. Esta medida le quita caja a la empresa, indicaron.
Cifras y datos
Cobriza. Se conoció que la mina Cobriza se encuentra sin actividad por huelga, tal como adelantamos.
Personal. Unos 2,500 trabajadores de Doe Run Perú operan en las instalaciones de La Oroya y Cobriza.