Editorial: Inadecuadamente empleados
“La sobreoferta de profesionales en especialidades convencionales como abogacía o contabilidad es otro factor”.
Por: Redacción Gestion.pe
Oferta laboral. El desencanto que sienten las personas que no consiguen un empleo que cubra sus expectativas encuentra un paralelo con los apuros que afrontan las empresas que no hallan profesionales idóneos. El ministro de Trabajo y Promoción del Empleo, Daniel Maurate, acaba de poner números a este doble problema; y la realidad es muy preocupante.
El 60% de los jóvenes profesionales trabaja haciendo algo para lo que no estudió, mientras que el 68% de empleadores declara que no consigue trabajadores con competencias apropiadas en el mercado local. Las grandes empresas pueden solucionar el asunto contratando profesionales extranjeros, pero las de menor tamaño no estarían en condiciones de hacerlo. Maurate sostuvo que “la alta tasa de inadecuación ocupacional se debe a que los jóvenes escogieron sus carreras sin mirar el mercado laboral o eligieron una profesión que no tiene retornos”.
Ciertamente, esa es una de las causas, pero no es la única, pues también entran a tallar factores como la competencia: los graduados de las mejores universidades e institutos técnicos generalmente acceden a puestos que se adecúan a sus aptitudes y son bien remunerados. Y en un mercado tan pequeño como el peruano, esos empleos son escasos.
La sobreoferta de profesionales en especialidades convencionales es otro factor: tenemos demasiados abogados, contadores, economistas y, dentro de poco, seguramente que también chefs y administradores hoteleros –sin contar la proliferación de MBA, un posgrado que hoy es ofrecido por casi todas las universidades–.
Las empresas tampoco salen bien libradas, ya que en muchas ocasiones no tienen claro qué tipo de profesionales necesitan. Un ejemplo es el reclutamiento de “ejecutivos de ventas”, ocupación para la cual buscan administradores, economistas y hasta ingenieros, cuando en realidad tendrían que solicitar los CV de profesionales del marketing.
¿Quién debe asumir la responsabilidad de adecuar la oferta a la demanda? Los datos que recopila y publica el Ministerio de Trabajo son una parte de la solución, pero mientras las empresas y las entidades educativas no se involucren, la inadecuación laboral continuará matando las expectativas de nuestros jóvenes.