“El TPP creará nuevos mercados en Asia pero también más competencia”
Paolo Giordano, economista principal del sector Integración y Comercio del BID, dice que el problema de fondo para las exportaciones peruanas es adaptarse a la conclusión del ciclo expansivo, sostiene el economista, quien participará en el IX Foro Internacional de Economía.
Por: Rocío Barja Marquina
Perú ya tiene 19 tratados de libre comercio (TLC) en vigencia y dos por entrar. ¿De estos cuántos aprovecha al 100%?
Si definimos el aprovechamiento en sentido estricto las tasas son muy altas. Por ejemplo, en el caso de los Estados Unidos el 90% de las exportaciones peruanas elegibles utiliza las preferencias. Si tomamos algunos casos adentro de la región, el 90% de las exportaciones entra libre de arancel en Chile y hasta el 98% en Argentina. Estos ejemplos muestran que los exportadores están aprovechando las oportunidades de acceso preferencial a los mercados. Sin embargo para varios TLC importantes como el que existe con China no disponemos de datos, y para otros como el vigente con la Unión Europea es aún muy temprano para tener una apreciación conclusiva.
¿Cómo podría mejorar su nivel de aprovechamiento?
Considerando un concepto de aprovechamiento más amplio que el simple uso de las preferencias, cabe preguntarse de qué manera los TLC ayudan a diversificar la oferta exportable, a incorporar tecnología en las exportaciones, y a favorecer la inserción de las empresas en las cadenas globales y regionales de valor. Son todas dimensiones en las cuales se está avanzado y se han logrado resultados alentadores en nichos sectoriales y mercados específicos, pero hay muchas más oportunidades para cosechar.
¿Qué cambios en sus políticas debería hacer para lograrlo?
Las agenda de reformas para maximizar las ventajas de los TLC es amplia y tanto el Gobierno como el sector privado están comprometidos con ella. Usando una metáfora estas políticas pueden ser descritas como el “hardware” y el “software” de la inserción internacional. El primero hace referencia a las inversiones en infraestructura de transporte, telecomunicaciones, educación e innovación tecnológica que permiten mejorar los procesos productivos y reducir los costos de transporte de los bienes y servicios exportados. El segundo indica todas las reformas de políticas necesarias para aumentar la eficacia del marco regulador, promover la actividad empresarial y facilitar el comercio internacional. Perú ya enmarca con eficacia las políticas de apoyo a la inserción internacional en el Plan Estratégico Nacional Exportador y en los Planes Estratégicos Regionales de Exportación. El desafío es acelerar la implementación para potenciar sus resultados en el marco de una coyuntura internacional desafiante.
Comentó (hace tres años, en una entrevista con Gestión) que el Perú solo utilizaba el 40% de su potencial comercial, ¿este indicador ha mejorado? ¿Cómo?
Más allá del número que no hemos vuelto a estimar recientemente, es importante apreciar cómo ha cambiado el concepto de potencial comercial en estos años. Desde 2011 hemos visto una marcada reducción en los precios de los productos básicos y muchos analistas coinciden que esta tendencia responde, por lo menos en parte, a transformaciones estructurales. Para un país con la oferta exportable tan concentrada en los minerales como Perú, esto implica una impostergable necesidad de reorientar sus exportaciones hacia sectores más dinámicos. Hay mucho potencial en nuevos productos como las uvas, las paltas o algunos servicios. O, por ejemplo, la quinoa, que responde a una demanda sofisticada, tiene un potencial en segmentos orgánicos de alto valor, y además es un producto ancestral que contribuye a la marca país. El gran reto es desarrollar estos nichos de exportación y llevar los casos exitosos a escalas significativas.
¿Cuál es el principal problema que en su opinión enfrenta el comercio exterior peruano?
El problema de fondo para las exportaciones peruanas de hoy en día es adaptarse a la conclusión del ciclo expansivo del cual se ha beneficiado en la última década. El país deberá enfrentar en el corto plazo los vientos adversos de la coyuntura: una desaceleración de la demanda externa, y una reducción de los precios de las materias primas, que sumados a un posible reajuste de las inversiones extranjeras y a un previsible aumento de las tasas de interés en los Estados Unidos presionarán las cuentas externas. Asimismo deberá avanzar en las reformas estructurales necesarias para reducir la dependencia de las exportaciones de productos primarios volátiles, lo que pasa necesariamente por una gran agenda de incremento de la productividad.
En tiempos de crisis como el actual, ¿Considera que fue oportuno elevar el drawback a las exportaciones peruanas?
Es un tema con muchas aristas. Por su diseño el sistema otorga un reintegro uniforme a los exportadores y por tanto podría ser ilegal respecto a las obligaciones asumidas en el marco de la Organización Mundial del Comercio ya que implica un subsidio. Por el otro la temporalidad de la medida interviene en un momento difícil para el sector exportador que sufre una reducción de la demanda externa y una alta volatilidad de los tipos de cambio que afectan la competitividad-precio de las exportaciones. No me corresponde opinar sobre su oportunidad pero invitaría a apreciar la medida en una perspectiva de largo plazo. Perú ha sido un modelo en materia de reformas que apuestan al sector exportador como eje del desarrollo. Los países que más éxito han tenido han sido aquellos que han sido capaces de mantener ese norte, si bien hacerlo en momentos como el actual es particularmente oneroso.
¿Qué tres medidas recomendaría priorizar al Gobierno para reactivar el sector exportador?
Lamentablemente no tenemos una receta mágica con tres ingredientes. De manera general, Perú está bien posicionado para profundizar una agenda que capitalice los logros del pasado y prepare al país para el futuro. Algunos elementos clave son el aprovechamiento de los tratados comerciales, la reducción de los costos comerciales – tanto los relacionados con la infraestructura como aquellos que dependen de leyes y regulaciones – y una decidida apuesta a la diversificación por medio de la promoción comercial y la atracción de las inversiones. Para ello son imprescindibles una visión de largo plazo y una fuerte coordinación entre un gran número de actores tanto públicos como privados. Asimismo es fundamental proporcionar a los exportadores información precisa para sostener los procesos de internacionalización, e invertir en educación ya que es la ineludible base para la creación de ventajas comparativas dinámicas en sectores del futuro como los servicios.
Se habla mucho de la importancia de diversificar la oferta exportable peruana. ¿Cómo lograrlo? ¿Cuáles deberían ser los primeros pasos a seguir?
Este es un tema muy amplio, y por tanto mencionaré solo dos principios generales sobre los cuales hay un consenso creciente. Primero mantener, por medio de políticas de desarrollo productivo modernas, un sistema de incentivos que aliente la innovación y la inversión en sectores de exportaciones no tradicionales y, sobretodo, elimine las inversiones que ya no son rentables. Segundo, dar prioridad a la construcción de marcos institucionales eficaces. En muchos casos esto significa estructurar las políticas públicas derrumbando barreras. Es decir que por un lado los Gobiernos deben estar fuertemente articulados con el sector privado – quien conoce cuales son los obstáculos realmente importantes en el terreno – y por el otro las distintas agencias públicas deben tener una instancia de coordinación efectiva y de alto nivel ya que los problemas prioritarios necesitan a menudo soluciones multi-sectoriales que no coinciden con fronteras burocráticas artificiales.
¿Qué opina del TPP (Acuerdo Transpacífico)? ¿Es conveniente para el Perú?
El TPP es un acuerdo de última generación que, cuando sea aprobado, tendrá un impacto transformativo no solamente sobre sus miembros sino también sobre todo el sistema comercial multilateral. En ese marco se definirán muchas de las reglas que regirán el comercio internacional de las próximas décadas. Para Perú será beneficioso en la medida que permitirá mantener los márgenes preferenciales negociados en los Estados Unidos y en los otros miembros con los cuales ya tiene un TLC, creará nuevos mercados en Asia y, sobretodo, determinará una ventaja temporal respecto a otros países que no son parte del acuerdo. Ahora bien, el TPP también creará presiones para que las empresas se ajusten a condiciones de competencia más estrictas. Por tanto para aprovechar los beneficios del TPP será conveniente disponer de políticas complementarias de ajuste al libre comercio.
¿Qué proyectos está apoyando y/o financiando (o está por aprobar) el BID en el Perú para fortalecer el sector exportador?
El BID tiene una larga tradición de apoyo al sector exportador peruano, tanto a nivel bilateral como a nivel regional en el marco del apoyo a la Alianza de Pacífico. En la actualidad los esfuerzos están concentrados en el financiamiento de una Ventanilla Única de Comercio Exterior que permitirá reducir los tiempos y costos en los trámites comerciales con un instrumento de clase mundial. Asimismo se vienen ejecutando varios proyectos de cooperación técnica que apoyan el aprovechamiento de los TLC, la modernización de la aduana, la facilitación comercial, la logística internacional, y las exportaciones de las pequeñas y medianas empresas. Completan la acción del Banco los programas de apoyo al financiamiento de las transacciones comerciales por medio de bancos locales.