SNI: Cerca de 300,000 personas lucran con el contrabando en Puno
Luego que el jefe de Estado afirmara que no le preocupaba que haya un poquito de contrabando, según estimaciones del gremio la masa de personas que se dedican a esta actividad ilegal lo conforman quienes cargan los camiones con mercadería de procedencia dudosa, le dan seguridad y lo venden.
Por: Karen Guardia
“A mí, francamente, no me preocupa que haya un poquito de contrabando. ¿A quién le importa eso?”, dijo el jefe de Estado Pedro Pablo Kuczynski (PPK) en su visita a Puno, una de las regiones azotadas por este delito y usada como puerta de ingreso de la mercadería ilegal.
Una prueba de la influencia del contrabando, justamente se da en este departamento donde cerca de 300,000 personas lucran con esta actividad ilícita.
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“Esta masa lo conforman quienes cargan los camiones (que traen la mercancía ilegal), dan seguridad a este material, lo transporta y lo vende”, explicó a Gestión.pe el presidente de la Comisión de Contrabando de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), Raúl Saldías.
Al cierre del 2015, de acuerdo a estimaciones del sector privado, la mercadería ingresada ilegalmente a valor de mercado ascendió a los US$ 2,000 millones, siendo los productos que llegaron bajo esta modalidad los derivados de petróleo (gasolina y gas), alimentos, papel, productos químicos, calzados, textiles y confecciones, tabaco y bebidas alcohólicas, así como productos agrícolas y plásticos en general.
No es poca cosa lo que genera esta industria ilegal. Entre sus principales efectos, es que evita la instalación de empresas formales y el desempleo, al generarle al fisco peruano menores ingresos.
“Por culpa del contrabando al año son alrededor de US$ 500 millones y en los últimos 10 años US$ 5,000 millones lo que el país dejó de percibir por esta actividad ilegal. Con ese monto cuántos hospitales se dejaron de construir”, cuestionó Saldías.
A lo que se suma, los riesgos a la salud de los propios consumidores que podrían ocasionar los productos falsificados y vencidos traídos por rutas sin control policial y aduanero. Ante este panorama, el representante gremial planteó cuatro acciones a llevarse a cabo para combatir esta práctica:
1.- La creación de un sistema de inspección nacional de incursión no intrusiva, que pueda contar con equipos de tecnología de punta, a ser usados por las instituciones encargadas de su persecución en las intervenciones.
2.- Crear las bases contra el contrabando para luchar contra las famosas ‘culebras’ que son llamadas popularmente las caravanas de camiones que puede llegar a 100 y que entran por el sur y el norte del país dado que el Estado obra en desventaja con los contrabandistas, que inclusive cuentan con seguridad especial para este tipo de camiones.
3.- Reasumir el control de las fronteras del país para evitar el ingreso de mercadería ilegal.
4.- Buscar la colaboración de otros países, la que se podría iniciar con los países vecinos para evitar que el contrabando salga de su país hacia el nuestro.
Juzgados especializados
Una medida que va ayudar a combatir este delito son los Juzgados Especializados en la lucha contra el contrabando y la piratería, creados en agosto de este año, que van a impulsar la creación también de fiscalías especializadas.