SNI advierte que alza del sueldo mínimo no debe obedecer a razones de coyuntura política

El gremio industrial explicó que un aumento de la RMV debe basarse en nivel de productividad para evitar un aumento del empleo informal a nivel de las mypes.

Por: Redacción Gestion.pe

El incremento de la remuneración mínima vital (RMV) debe estar en función del nivel de productividad, y no obedecer a razones de coyuntura política, porque ello distorsiona el mercado laboral y puede aumentar el nivel de informalidad, señaló hoy el presidente de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), Andreas von Wedemeyer.

Agregó que los cambios en la RMV deben de aprobarse al interior del Consejo Nacional de Trabajo (CNT), ya que cualquier modificación de índole política es anti técnica y distorsionante.

“Cualquier alza del sueldo mínimo puede acrecentar la informalidad, principalmente en las micro y pequeñas empresas (mypes), que representan el 98% de las unidades productivas, y que se caracterizan por tener un bajo nivel de productividad”, precisó.

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Por ello consideró que elevar el salario mínimo en las actuales circunstancias de recesión industrial, y con una alta rigidez laboral y de baja productividad, complicaría aún más el panorama laboral del país.

“En lugar de aumentar el salario mínimo, lo que se debe hacer es una reforma laboral que permita incrementar la productividad, el empleo formal y por ende, los ingresos de los trabajadores”, propuso.

El líder gremial, sostuvo que la industria peruana, que dota de empleo directo a 1,6 millones de trabajadores, atraviesa actualmente un proceso contractivo, que viene afectando no solo al empleo, sino también los ingresos de los trabajadores inmersos en el sector manufacturero, e indirectamente a los de los sectores que se encuentran vinculados económicamente con la industria.

Situación de la manufactura
Von Wedemeyer sostuvo que la industria manufacturera se redujo por segundo año consecutivo, ya que en el 2015 cayó en 1,7% y en el 2014 bajó en 3,2%.

“Las últimas cifras de enero 2016 confirman la tasa negativa del sector industrial; en ese mes la manufactura peruana cayó en 3.9%”, refirió.

Según la SNI, en el año 2015, el empleo formal en empresas manufactureras con más de 10 trabajadores, se contrajo por tercer año consecutivo y presenta una tendencia decreciente. En el 2013 se redujo en 0.1%, en el 2014 la caída fue de 1.5%, y en el 2015 la pérdida de empleos en este tipo de empresas alcanzó el 2%.

“Lo que puede estar sucediendo es que al reducirse el empleo formal en la industria, como consecuencia de la disminución de la actividad, algunos trabajadores que antes laboraban en la formalidad, estarían incorporándose en empresas informales, y con sueldos más bajos”, alertó la SNI.