Reducir dependencia de minerales y diversificar economía, tarea pendiente en Perú
El valor de las exportaciones agropecuarias se ha más que duplicado en la última década y representa ahora 12.7% del total de las ventas peruanas, con la oferta de nuevos productos y la conquista de nuevos mercados como China, Estados Unidos y Europa.
Por: Redacción Gestion.pe
Perú está ampliando su abanico de exportaciones con productos agropecuarios para reducir su dependencia de los minerales, pero aún está lejos de diversificar su economía dependiente de materias primas, una tarea de largo aliento porque requiere más inversión en infraestructura y fortalecer la industria.
El valor de las exportaciones agropecuarias se ha más que duplicado en la última década y representa ahora 12.7% del total de las ventas peruanas, con la oferta de nuevos productos y la conquista de nuevos mercados como China, Estados Unidos y Europa, aunque está muy por debajo del 58.8% que abarca los envíos de todo el clave sector minero.
En tanto la industria local, con algunos sectores con potencial como el textil, calzado y manufactura con valor agregado, se ha quedado rezagada en productividad y competitividad por la falta de inversiones y el ingreso de bienes importados a bajo costo.
“Esta dependencia de los minerales continúa siendo un área de preocupación en la medida que el país tiene que seguir invirtiendo para conseguir una diversificación económica un poco más fuerte”, dijo a Reuters el director del Banco Mundial para Bolivia, Chile, Ecuador, Perú y Venezuela, Alberto Rodríguez.
El funcionario afirmó que hay algunos sectores que comienzan a ser prometedores como la agroexportación, pero están sujetos también al ciclo de las materias primas y sus flujos son muy pequeños y “no son comparables” con las ventas mineras.
Para los industriales locales, el desarrollo de nuevos sectores productivos debe ir acompañado de una fuerte inversión en infraestructura, clave para reducir costos; así como la educación, innovación tecnológica y mejor capital humano.
La industria textil por ejemplo está muy golpeada por la informalidad y por el ingreso de productos importados de China. Pero posee algunas ventajas como tener el algodón “pima” o de alta calidad usado para confeccionar ropa, que ha permitido el desarrollo de un clúster de 20 manzanas llamado Gamarra en un barrio limeño, y que desde la década pasada exporta prendas a países vecinos como Brasil, Venezuela, Chile y Ecuador.
En ese emporio comercial, por la gran demanda del negocio, un metro cuadrado puede costar US$ 25,000, cinco veces más de lo que vale en el distrito más exclusivo de Lima.
“Perú tiene un alto potencial industrial y exportador de manufacturas, que puede ser aprovechado si se generan las condiciones para que el país sea un destino competitivo de inversiones en ese sentido”, dijo el presidente de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), Andreas von Wedemeyer.
Nuevos retos
Para el Gobierno del presidente Pedro Pablo Kuczynski, un ex banquero del Wall Street, la inversión es una de sus prioridades para impulsar el desarrollo económico, que hasta el momento está sostenido principalmente por la exportación de metales.
Analistas afirman que esta característica de ingresos extras de dólares por la venta de materias primas no ha afectado demasiado el tipo de cambio local y la competitividad de algunos sectores de la manufactura; en medio de un rol activo del Banco Central que busca reducir la volatilidad de la moneda.
Perú se convirtió este año en el segundo mayor productor global de cobre por la operación de nuevas minas. Sin embargo es una industria que está al vaivén de los precios internacionales de los metales y el país andino ya sufrió las caídas del mercado con el freno de su economía en el 2014 y el 2009.
“¿Cuál es la estrategia país?, la minería es una actividad finita, pero hay otros sectores que pueden permitirnos recuperar el nivel de crecimiento económico como la agricultura”, dijo a Reuters el ministro de Agricultura, José Hernández.
En los últimos años la uva se ha convertido en el mayor producto del sector agroexportador en Perú, que ha preocupado a su vecino Chile el mayor exportador mundial de la fruta por su ingreso a atractivos mercados como China y Estados Unidos.
Asimismo, la palta y los arándanos podrían convertirse en las nuevas estrellas de la agroexportación peruana, gracias a la ampliación de la frontera agrícola debido a nuevas plantas de irrigación en la desértica costa peruana, según expertos.
“Arándanos, uvas y paltas seguirán creciendo este año. La clave para los dos primeros productos es conseguir diferenciación en los mercados a través de acceso a la genética”, afirmó Federico Beltrán, un empresario dedicado a la exportación de arándanos y experto en agroexportación.
Si bien hay esfuerzos del Gobierno para apuntalar atrasados sectores, una gran traba para la diversificación productiva es la centralización, declaró Rodríguez del Banco Mundial.
La capital Lima concentra casi la mitad del Producto Bruto Interno (PBI) del país y un tercio de la población, que asciende a 31 millones de habitantes.
“Cuando hay centralización tan fuerte es difícil que haya polos de desarrollo local para aprovechar estas vocaciones económicas locales y regionales, que son importantes para una diversificación productiva”, afirmó Rodríguez.
El funcionario comentó además que la calidad de la educación es clave para desarrollar el capital humano, con lo cual un país puede innovar y abrir nuevos mercados con valor agregado.
“Y este es un proceso de largo plazo, en el que Perú viene trabajando, pero hay un terreno grande para avanzar”, manifestó.