Producción de café cayó 23% entre enero y mayo por secuela de la roya

La mayor baja se presenta en las regiones de Junín, Cusco, Ayacucho y Puno, donde los productores reclaman declarar en emergencia la caficultura, y se implementen medidas de contingencia, afirmó la Junta Nacional del Café (JNC).

Por: Redacción Gestion.pe

En el período enero-mayo el café registró cosecha de apenas dos millones 184 mil quintales, contra dos millones 849 mil del año pasado, representando una caída del 23%, según cifras del Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri).

“Estas cifras nos proyectan a una posible cosecha de 4.3 millones de quintales, en la medida que la recolección ejecutada representa el 50% de la producción anual. Estamos retrocediendo a cifras de hace diez años, con grave impacto en los ingresos de las 220 mil familias”, precisó el presidente de la JNC, Anner Román.

Agregó que esta fuerte caída de la producción se debe a la presencia de la roya, no combatida adecuadamente, y por falta de recursos para renovar las plantaciones viejas.

“Lamentablemente las autoridades sectoriales no evaluaron la dimensión del daño y optaron por olvidarse de los cafetaleros”, expresó.

En los primeros cinco meses del año el volumen exportado fue de 668 mil quintales por un valor de US$ 81 millones, contra 87 millones de similar período del 2013 y un volumen de 661 mil quintales.

Los embarques de abril y mayo de este año fueron menos del 50% de lo embarcado el año pasado, debido a la fuerte escasez del grano en las zonas de producción.

Ejecutivos de las cooperativas y las empresas exportadoras coinciden en estimar una fuerte caída en las exportaciones de café, tanto en volumen como en valor.

“Ojalá embarquemos 4.3 millones de quintales y alcancemos los US$ 700 millones. Es un año más difícil que los anteriores debido a la escasez de grano, exceso de lluvias en período de cosecha y la volatilidad de precios”, remarcó.

Román señaló que la crisis social por falta de ingresos de la población de más de 100 distritos rurales que viven del café, se agudizará en los próximos meses, y que mucha gente seguirá abandonando cafetales para dedicarse a otras actividades, entre ellas cultivar coca.

“En el Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM), Cusco y Puno, los cafetaleros migraron a otras regiones, y otros optaron por sembrar coca atraídos por los altos precios de la hoja. En la selva de Ayacucho, una hectárea de coca genera 15 mil dólares de ingresos al año, mientras que por café no se logran ni mil dólares”, concluyó.