Panamá pide a Colombia aceptar de una vez por todas fallo de la OMC

La pasada semana la viceministra de Economía y Finanzas panameña, Eyda Varela, manifestó que el gobierno trabaja en posibles medidas de retorsión si Colombia no acataba el fallo de la OMC.

Por: Redacción Gestion.pe

(AFP) El presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, exigió a Colombia aceptar un fallo de la Organización Mundial de Comercio (OMC) que le exige eliminar sus aranceles a la importaciones de textiles y calzado del país centroamericano.

“Espero que el gobierno de Colombia de una vez por todas acepte el fallo de la OMC y se levante las medidas restrictivas al comercio con Panamá”, dijo durante un acto público en la sede del gobierno panameño.

“Colombia debe aceptar ya el fallo de la OMC. Panamá es un país aliado, amigo, fronterizo”, añadió el presidente panameño, según el cual, “las relaciones diplomáticas tienen que ser integrales, no pueden ser aisladas”.

Varela informó que este martes el tema será llevado al Consejo de Gabinete.

La pasada semana la viceministra de Economía y Finanzas panameña, Eyda Varela, manifestó que el gobierno trabaja en posibles medidas de retorsión si Colombia no acataba el fallo de la OMC.

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, manifestó el 26 de julio que apoyará a los industriales de su país pese al fallo de la OMC.

“Vamos a estudiar y a seguir tomando, dentro del ordenamiento internacional, las medidas que sean necesarias para protegerla de la subfacturación y del posible lavado de activos”, dijo Santos.

Panamá denunció a Colombia ante la OMC en el 2013 por la imposición de un arancel a los productos textiles, prendas de vestir y calzado procedentes del país centroamericano.

La OMC dio la razón a Panamá al considerar que el fallo “entorpece la cruzada para atacar el contrabando y el comercio ilícito”.

La mayoría de los textiles y calzado gravados por Colombia proceden de países como China y son reexportados a través de la Zona Libre (franca) de Colón (norte).

Según las autoridades de Panamá el cobro de esos aranceles produjo una caída de 30% en las ventas a Colombia y creó dificultades económicas en la zona franca panameña.