Conocer la realidad nacional, el requisito para prever conflictos
Un modelo de desarrollo sostenible sería clave para evitar que los problemas paralicen proyectos. La academia se presenta como el espacio pertinente para el debate.
Por: Sandra Vargas
Es innegable que la mayoría de decisiones empresariales se dan en Lima, a pesar de que muchas de las zonas donde se ejecutan las operaciones y surgen conflictos están fuera de la capital.
Al respecto, Miguel Ferré, director del Programa Especialista en Planeamiento Estratégico de la Universidad de Piura, ensaya una hipótesis para este centralismo.
“Una persona en el primer nivel de decisiones tiene muchos temas en los que ocuparse e ir a la zona de las operaciones es complicado; entonces, parece más lógico que el gerente que está en el lugar le informe y le plantee”.
Mirada integradora
Ferré observa con preocupación que el Gobierno y los directivos de las empresas se concentren en una sola región y tengan un sesgo “economicista”.
En su experiencia ha podido advertir que las empresas gastan mucho en acercarse a las comunidades porque no las conocen, y asegura que “solo con buena voluntad y gastando dinero no se resuelven los problemas que después afloran paralizando proyectos”.
Afrontando los conflictos
La mejor estrategia es adelantarse a los conflictos antes de que surjan, afirma el especialista.
¿Cómo lograrlo? Propiciando el desarrollo sostenible e integral de una zona y sus pobladores. “Me interesa que las personas mejoren como seres humanos”.
Esto implica que los responsables de las decisiones entiendan las necesidades y aspiraciones de los actores sociales impactados por un proyecto de inversión.
Espacio académico
Para Ferré, muchas veces esa mirada integral no se desarrolla desde la universidad. Es más, considera que esta “debería ser un lugar de intercambio de ideas, sin intereses particulares”.
Por este motivo, la Escuela de Dirección de la Universidad de Piura (PAD) implementó el Programa de Realidad Nacional para el Desarrollo de Inversiones.
A través de la discusión de problemas actuales en diferentes zonas se busca entender mejor lo que está ocurriendo en el país.
Ferré señala que el plus de hacerlo en un aula es que la discusión académica no supone un ambiente conflictivo, sino que “se presta a hablar con transparencia, respeto y escuchando a los demás”.