Brecha de inversión en infraestructura se cerrará en veinte años si no se cambia el ritmo

Perú Top Publications señala ocho trabas a las inversiones en proyectos de infraestructura de servicios de uso público en el país. Y anota que no hay un plan nacional para promover los proyectos.

Por: Elías García

La brecha de inversión en infraestructura de uso público en el país, que el año 2012 AFIN calculara en US$88,000 millones, sigue creciendo y actualmente asciende a US$121 mil millones, según el estudio Proyectos de Infraestructura en Perú 2015-2017, de Perú Top Publications.

Sin embargo, en el país ya existen los proyectos que permitirán cerrar gran parte de esa brecha, y que suman una cartera de 2,083 iniciativas, por un total acumulado de US$113 mil millones, explica José Carlos Lumbreras, Gerente de Desarrollo de Proyectos de Perú Top Publications.

Refiere que si bien un grupo de esos proyectos ya han sido adjudicados, el grueso está aún por convocar, aunque observó que, al ritmo en que se adjudican esas iniciativas, va a tomar veinte en cerrar la brecha de inversión estimada.

Precisó que el estudio en mención, calcula que la mayor brecha se centra en las inversiones en transporte, con US$32,935 millones, es decir un 23.85% del total estimado, siendo el mayor rubro por cubrir el de redes viales, seguido por ferrocarriles, puertos y aeropuertos. Le siguen inversiones por realizar en el sector telecomunicaciones, energía, entre otros (ver cuadro).

Trabas
Lumbreras indica que el reporte identifica ocho principales trabas, entre ellas los excesivos trámites que exigen gobiernos municipales y regionales, además de la corrupción. Otra traba la constituye las restricciones en el gasto, que generan un incentivo perverso que infunde temor en los funcionarios cuando se intenta acelerar procesos.

Así por ejemplo, indicó que hay proyectos adjudicados entre el 2012 y el 2014 por US$16,993 millones, que están aún en etapas iniciales de inversión y que se espera se ejecuten a mediano plazo.

También es otra traba, la falta de equipos técnicos y falta de personal especializado que supervice el avance de los proyectos, a lo que se suman los conflictos sociales, así como el tema de las expropiaciones.

El principal problema, sin embargo, anotó, es que no existe un plan nacional que aglutine todos estos proyectos y les de prioridad, y no existen cronogramas exactos de cuándo se van a concretar, y que se pueda presentar a los inversionistas para promover la inversión.