Aumentan las probabilidades de un acuerdo por los bonos del impago argentino

Los acreedores que poseen bonos que quedaron fuera del canje por la cesación de pagos de Argentina en 2001 tienen cada vez más confianza en que el gobierno negociará una vez que venza una cláusula que le impide llegar a un acuerdo.

Argentina dijo que no puede negociar con los holdouts. (Foto: Reuters)

Por: Redacción Gestion.pe

(Bloomberg).- Los pagarés denominados en dólares subieron 120 centavos por dólar de valor nominal, de acuerdo con los precios que reúne Exotix USA que se especializa en deuda ilíquida y con problemas de recupero de mercados emergentes .

Se trata de la cifra más alta desde el 30 de julio, cuando Argentina entró en suspensión de pagos de los títulos emitidos en las reestructuraciones de deuda de 2005 y 2010.

Este último impago se produjo después que la nación se negó a cumplir con una orden judicial de los Estados Unidos que le exigía acordar con los llamados holdouts, un grupo de acreedores que habían rechazado el canje y presentado una demanda para percibir el pago total.

Argentina ha dicho que no puede negociar con los holdouts encabezados por el multimillonario Paul Singer hasta que no venza la cláusula de los bonos reestructurados, que prohíbe al país ofrecer mejores términos a los acreedores que rechazaron los canjes anteriores, algo que ocurrirá el 31 de diciembre.

El fallo que dictó la corte la semana pasada para incluir a otros tenedores de bonos impagos desde 2001 en cualquier posible negociación ha acrecentado el optimismo de los inversores respecto a un acuerdo en tanto Argentina reiteró el 7 de noviembre que la solución debe incluir a todos los bonistas.

“Las expectativas son cada vez mayores”, dijo telefónicamente desde Londres Phillip Blackwood, gerente de cartera de EM Quest Capital LLP que posee bonos impagos de 2001. “Se dice que las negociaciones comenzarán en el primer trimestre y no tiene lógica ninguna otra cosa que una solución que abarque a todos”.

Cláusula RUFO
Jésica Rey, portavoz del Ministerio de Economía, no respondió los mensajes en los que se le pedían comentarios sobre las posibles conversaciones.

Después que Argentina suspendió los pagos de US$95.000 millones de bonos en 2001, los tenedores de alrededor del 92% de la deuda aceptaron recibir nuevos títulos con una pérdida de aproximadamente el 70%.

Algunos inversores particulares y fondos de cobertura, incluido NML Capital Ltd. de Singer, demandaron al país para obtener el pago total. Los funcionarios argentinos han dicho que no respetar la cláusula RUFO en los bonos reestructurados podría dar lugar a demandas adicionales por US$ 120,000 millones.

El 3 de noviembre, el juez de Distrito de los EE.UU. Thomas Griesa otorgó al mediador especial que designó para coordinar las conversaciones entre Argentina y los acreedores nuevas facultades para mantener negociaciones por “algunos o todos” los juicios pendientes relacionados con los bonos impagos.